Deslizamiento de masas: medir el impacto para salvar vidas

La PUCP, la UNSA, de Arequipa, y Wageningen University, de Países Bajos, unen esfuerzos para desarrollar un modelo integral que permita estimar el impacto de huaicos y lahares en zonas vulnerables de Lima y Arequipa.

30/04/2024

“No se lo deseo a nadie. Solo han quedado escombros de lo que era mi casa”. Don Paulino no mira a la cámara, mientras carga a su mascota que pudo rescatar entre el lodo. Su voz adquiere un tono de desesperanza ante las preguntas de la reportera. “De verdad que ahorita estoy desamparado y no tengo a donde ir”, sentencia. 

Los medios de comunicación nos lo recuerdan cada cierto tiempo. Así como Paulino, constantemente, muchos otros ciudadanos en el país pierden todo o sus vidas están en riesgo debido a los huaicos en temporadas de lluvia. Y, sin duda, el fenómeno de El Niño puede agravar estas condiciones.  

“La población peruana ha sufrido mucho por los deslizamientos. No solo pierden cosas materiales, sino también personas queridas y pasan por momentos muy difíciles”, señala Martijn Wester, de Wageningen University de Países Bajos, quien ha tenido la oportunidad de conocer la grave problemática nacional relacionada con los desastres naturales. 

“Observamos que las personas más pobres viven en áreas de alto riesgo y no tenían suficientes recursos para protegerse o saber qué hacer en caso de los deslizamientos. Por esta razón, decidimos hacer este proyecto, para ayudarles a estar más seguras”, expresa. 

De esta manera, surge “Hacia un modelo de estimación del impacto integral en las poblaciones vulnerables por deslizamiento de masas, usando ciencia de datos y la simulación de sistemas complejos”. 

En ese marco, la Pontificia Universidad Católica del Perú y la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA), de Arequipa , unieron esfuerzos para desarrollar esta iniciativa junto con la Wageningen University, de Países Bajos. El proyecto es financiado por ProCiencia, y se inició el 2023 y se desarrollará hasta el 2026.

A través de esta mirada conjunta, se busca diseñar un modelo integral que permita estimar el impacto por deslizamiento de masas (huaicos y lahares). El modelo, como señala el resumen, “utiliza los datos que caracterizan la geomorfología física, el urbanismo, la economía, y las características sociodemográficas de las zonas en estudio ubicadas en Carabayllo (Lima) y Mariano Melgar (Arequipa)”.

“El problema en ambos distritos es que poseen poblaciones que habitan en las cercanías o dentro de las quebradas, las cuales tienen historial de activarse en periodos donde la caída de lluvias se intensifica”,

Jorge Vargas Florez

Docente del Departamento Académico de Ingeniería (PUCP)

La población de las zonas en estudio tiene ciertas características, señala Jorge Vargas Florez, docente del Departamento Académico de Ingeniería de la PUCP e investigador principal del proyecto, que las hace vulnerable a movimiento de masas. “Las características geológicas y atmosféricas del entorno son propicias para la caída de huaicos (Lima) y lahares (Arequipa), el problema en ambos distritos es que poseen poblaciones que habitan en las cercanías o dentro de las quebradas que tienen historial de activarse en periodos donde la caída de lluvias se intensifica, como sucede durante el fenómeno de El Niño”, completa.

Los territorios en estudio, agrega el investigador, se caracterizan por ser parte de las expansiones territoriales de las comunidades asentadas, que se conforman de manera informal, aisladas de la planificación del gobierno local, y están constituidas por población social y económicamente diversa. 

Sobre ello, agrega que el deslizamiento de masas es algo ‘normal’, en el sentido que, cuando hay unas condiciones propicias por las características geológicas, atmosféricas (lluvias) y geográficas (elevaciones del territorio), se van a dar desprendimientos de tierra. Estas, en muchas partes del Perú, se llaman ‘huaicos’ y, en particular, en Arequipa, se llaman “lahares” por estar asociados con los territorios alrededor de los volcanes.

“El problema es que el movimiento de masas cuando se da en grandes proporciones por su cantidad y velocidad, como un flujo de tierra, plantas, rocas y desechos, encuentra en su recorrido a comunidades que habitan en las quebradas y alrededores, por lo que genera destrucción, muerte y otras pérdidas que afectan la vida de la población”, dice Vargas Florez.

Por su parte, el investigador Nino Puma, del Departamento Académico de Geología y Geofísica de la (UNSA), dice que las partes altas del distrito de Mariano Melgar se han acentuado en las faldas del volcán Misti, lo que ha ocasionado que sea afectado por los lahares que se originan en periodos de lluvia. “Estos lahares son originados principalmente debido al material volcánico suelto, la pendiente, las quebradas y el agua de la lluvia entre los meses de verano”, señala.

Si bien explica que, a pesar de que se han elaborado mapas de peligro volcánico sobre lahares que indican áreas vulnerables, “la población desconoce estos mapas, esto aunado a la necesidad de tener un terreno donde vivir ha generado el asentamiento de las personas en dichas zonas de peligro”.

Queremos darles información y herramientas para que puedan enfrentar este problema. Nuestra intención es dialogar con las autoridades sobre la gravedad de esta situación y proponerles soluciones posibles”.

Martijn Wester

Investigador de Wageningen University

Sobre el proyecto

Financiado por ProCiencia, el modelo que se desarrollará en el marco del proyecto busca estimar el impacto generado (pérdidas humanas, pérdidas estructurales, pérdidas económicas) por el movimiento de masas, considerando no solo los factores de origen ya mencionados (geología, atmósfera y geografía), adicionalmente va a incluir los factores urbanístico, social y económico preexistentes, para integrarlo en una representación matemática que represente el sistema complejo mencionado, para esto se va a utilizar simulación de sistemas, econometría y analítica de datos.

“Desde la PUCP estamos integrando la visión de las distintas disciplinas para poder comprender el sistema complejo en estudio y proponer una solución sostenible, viable y reproducible”, dice Vargas Florez.

“Este intercambio de información y experiencia enriquece nuestras investigaciones y fortalece nuestras capacidades para enfrentar los desafíos comunes que enfrentamos en la gestión de riesgos naturales”.

Nino Puma

Docente del Departamento Académico de Geología y Geofísica (UNSA)

Para ello, han tomado contacto con Cenepred, la Municipalidad de Carabayllo y la Municipalidad de Mariano Melgar. “El objetivo final es poder expresar el modelo en una aplicación informática que permita a las autoridades locales anticipar los impactos generados por el movimiento de masas, y de esa forma poder orientar sus presupuestos de mitigación de la vulnerabilidad de manera eficiente y eficaz, incrementando así la resiliencia comunitaria”, completa.

Por su parte, el investigador Nino Puma, del Departamento Académico de Geología y Geofísica de la (UNSA), señala que, gracias al uso de tecnologías innovadoras como el uso de imágenes satélite, la simulación numérica avanzada y los sistemas de información geográfica (SIG), “estamos mejorando nuestra comprensión de la dinámica, y los factores desencadenantes de los lahares y deslizamientos en masa”. La integración de estos enfoques tecnológicos nos brinda una visión detallada de estos eventos, lo que a su vez nos permite desarrollar estrategias de mitigación y respuestas más efectivas.

Puma explica que la colaboración con la PUCP y la Universidad Wageningen les ha proporcionado acceso a datos y conocimientos especializados, así como nos ha permitido participar en proyectos conjuntos que emplean tecnologías de vanguardia. “Este intercambio de información y experiencia no solo enriquece nuestras investigaciones, sino que también fortalece nuestras capacidades para enfrentar los desafíos comunes que enfrentamos en la gestión de riesgos naturales”, incide.

Por otro lado, Martijn Wester, de Wageningen University, incide en su preocupación y señala que decidieron impulsar este proyecto “para ayudar a las personas con menos recursos económicos que viven en áreas de alto riesgo y no tenían suficientes recursos para protegerse o saber qué hacer en caso de los deslizamientos”.

“Queremos darles información y herramientas para que puedan enfrentar este problema de manera más fácil y protegerse mejor. Nuestra intención es dialogar con las autoridades sobre la gravedad de esta situación y proponerles soluciones posibles que puedan implementar para minimizar el impacto de futuros eventos de El Niño”, finaliza.