Columna publicada en Punto Edu, Año 10 N°331. También disponible aquí.
Naturalezas construidas: Hacia una agenda de investigación
Por Gisselle Vila, investigadora de GEAS
La ausencia de camellos en El Corán, según Borges, revelaría la autenticidad del libro, dado que este se plantea en medio de una sociedad donde los camellos son dados por sentado. Fernando Coronil en “The magical state. Nature, money and modernity in Venezuela” (1997) sigue esa afirmación para argumentar que, del mismo modo, la naturaleza se encuentra invisibilizada en la teoría social occidental, volviendo la apropiación masiva de recursos naturales un hecho incuestionable. Comprender la naturalización de tal apropiación implica comprender, en primer lugar, cuál es la relación entre naturaleza y sociedad. En principio, la pregunta asume la existencia de dos constructos independientes. Materialmente, sin embargo, ¿podemos afirmar la existencia de sociedades fuera de la naturaleza? Considerando que la relación con la naturaleza no es simplemente una de dependencia sino de pertenencia, conviene poner a prueba los discursos que median la naturalización de la aparente externalidad de la naturaleza de las relaciones humanas.
A partir de las múltiples definiciones que se trazan desde la ecología política, es posible sostener que la naturaleza es material y discursivamente construida, guardando implicancias concretas para el análisis. En primer lugar, las naturalezas construidas varían según los grupos que las imaginan; por lo tanto, los significados y apropiaciones materiales no son compartidos e, inclusive, son disputados. En segundo lugar, la construcción de la naturaleza implica el desarrollo de definiciones (qué es y qué no es), sus clasificaciones (cómo es) y la racionalización de su uso. Estas construcciones revelan desigualdades socioecológicas históricamente construidas que se entretejen en distintas escalas y, por ende, son comprensibles a partir de análisis que las enlacen. Son necesarios entonces enfoques, conceptos y categorías analíticas que nos acerquen a la comprensión sobre la intervención humana en el medio biogeofísico que denominamos naturaleza. Puntos de partida que nos ayuden a pensar las condiciones de esta intervención y nos adviertan de los peligros de incidir en enfoques primordialistas. Análisis que recuperan relatos de la pluralidad y la diferencia, retando construcciones de la naturaleza unívocas y apropiaciones naturalizadas.
En este contexto, las ciencias sociales han desarrollado aproximaciones para explicar problemas socio-ambientales, como la agencia y movilización social propia de escenarios de crisis ambiental, las políticas de la extracción de recursos naturales, las configuraciones institucionales para la gobernanza ambiental, entre otros. El libro Agenda de investigación en temas socioambientales en el Perú: Aportes desde las ciencias sociales (editado por Gerardo Damonte y Gisselle Vila, 2014) propone centrar dichos aportes proponiendo líneas de investigación que puedan contribuir con sentar las bases para la indagación rigurosa sobre tales problemas, a partir del análisis de la relación entre las sociedades y la naturaleza. Recogiendo la experiencia de investigación en el tema desde las ciencias sociales de la PUCP, la publicación organiza tres ejes temáticos: institucionalidad ambiental, conflictos y negociaciones socioambientales, y cambio climático y saberes locales. Compila estimulantes puntos de partida para quienes anden en búsqueda de retar, parafraseando a César Calvo, los silencios y las historias malamente narradas sobre la apropiación humana de los recursos naturales.