
REALIDAD VIRTUAL VS REALIDAD AUMENTADA:
¿COMPETENCIA O COMPLEMENTO?
Lic. Eduardo Villavicencio Molina
Grupo AVATAR PUCP
Las tecnologías nos sorprenden cada día más con los nuevos descubrimientos, avances, herramientas y aplicaciones que podemos instalar ya no sólo en las computadoras, sino en nuestros dispositivos móviles. Dentro de ellas tenemos la “realidad virtual” y la “realidad aumentada”. Según el Diccionario de la Real Academia Española, realidad es la “existencia real y efectiva de algo; la verdad, lo que ocurre verdaderamente; y lo que es efectivo o tiene valor práctico, en contraposición con lo fantástico e ilusorio”. La RAE nos ofrece también una definición de realidad virtual como la “representación de escenas o imágenes de objetos, producida por un sistema informático, que da la sensación de su existencia real”. ¿Y la realidad aumentada? Es la tecnología que permite añadir otros contenidos a la realidad misma, mediante aplicaciones como los smartphones y tablets, los cuales captan imágenes de nuestro entorno real para añadirles información adicional.
La realidad virtual nos permite tener acceso a un entorno en el que realmente no nos encontramos. Mundos virtuales como el de Second Life (SL) hacen ahora posible acceder a ellos mediante los Oculus Rift, marca que fabrica cascos de realidad virtual de propiedad de Facebook y gracias a los cuales ya no se observa el entorno de SL desde la pantalla, viendo a nuestro personaje 3D, sino que nosotros mismos podemos ser el avatar dentro del mundo virtual, desplazarnos e interactuar con otras personas que se encuentran conectadas desde cualquier parte del mundo como nos muestra el siguiente video:
Con la realidad aumentada el acceso a gran información y de manera ilustrada es también una poderosa herramienta de conocimientos. Imaginemos que realizamos una visita turística a una ciudad por primera vez y no conocemos ninguno de los lugares, pudiéndonos perder de lo más interesante. Teniendo a mano un Smartphone con la aplicación adecuada provista por los municipios, podríamos ver qué atractivos turísticos se encuentran a nuestro alrededor como museos, parques, restaurantes, cines, teatros bastando con sólo enfocar la cámara del móvil y en nuestra pantalla táctil apreciaremos también las distancias a las que se encuentra cada lugar y lo que dentro del mismo podemos encontrar. Esta nueva tecnología también puede ser de gran utilidad para la ciencia y la medicina, permitiendo a un notable médico tener acceso a información visual de un paciente que se encuentra en otro país, ver sus órganos e incluso intervenir a distancia.
Ambas tecnologías son de gran importancia y utilidad, no compitiendo una con la otra sino complementándose. Mientras que con la realidad virtual accedemos a todo un mundo fuera de nuestro espacio físico, con la realidad aumentada traemos virtualmente a nuestro entorno real toda una dimensión de objetos, animaciones y conocimientos. Desde luego que aplicados al desarrollo educativo y cultural de cualquier sociedad, pueden ser poderosas herramientas para cualquier edad y desde cualquier ubicación. Los cascos de realidad virtual nos pueden permitir compartir espacio con personas de otros países dentro de un aula de clases, ver y escuchar al maestro e interactuar de un modo más “real” e ilustrativo, facilitando y motivando el aprendizaje, así como la participación. Con un Smartphone y una app de realidad aumentada podríamos visitar un museo de sitio, una ciudadela como Machu Picchu, la Acrópolis, el Foro Romano y por nuestra pantalla ver representaciones de lo que en algún momento de la historia, cientos o miles de años atrás, pudo ocurrir en dichos lugares.